Vuelve el maquillaje maximalista, vuelve la fiesta del color y regresan las grandes paletas de sombras para experimentar, disfrutar y jugar con nuestra mirada y un pincel. No lo decimos nosotros (aunque la Mucho Happy Mini de Urban Decay bien podría estar dándonos pistas), sino el estudio creativo londinense The Digital Fairy en su cuenta de TikTok y un buen puñado de los desfiles que más tendencias avanzan.
Después de varias temporadas en las que las marcas nos enseñaron a preparar bien la piel, a aplicar la prebase, el fondo y el corrector para luego sellarlos; a incorporar un poco de delineado; una sombra en tonos ocres con el fin de amplificar la mirada; un iluminador sutil y efectivo; un rubor de lo más natural y un brillo labial repulpante… es la hora de tomar ese rostro clean y darle un poco de ¡azúuuuuuucar!
Es cierto que ya habíamos empezado a comprar sombras en formato individual (¡qué fantasía los Eyeshadow Shimmer Powder, de Bellapierre!), pensando en asentarnos en un solo look. Pero no es menos cierto que en el fondo siempre soñamos con volver a dar rienda suelta a nuestra creatividad con las opciones ilimitadas de las maxipaletas (sin salir de Bellapierre, atent@s al espíritu mixtape que nos entrega 90’s Glam). ¿O no?
Hace cuatro años, "la gente se centraba más en el cuidado de la piel en casa y, francamente, nadie se esforzaba mucho a la hora de desarrollar un maquillaje completo", señalaba recientemente a Who What Wear la maquilladora Nikki DeRoest, que ha puesto sus pinceles al servicio de estrellas como Phoebe Dynevor, Emma Corrin o Amber Valletta. Sin embargo, "creo que ahora se está volviendo más aventurera y está ampliando sus horizontes creativos a través del maquillaje. Es hora de recuperar los mejores trucos para una mirada emocionante y atrevida”.
A falta de nuevos capítulos de Euphoria con los que abrir boca (y, confesémoslo: tomar inspiración), todos los medios de comunicación insisten al unísono: “Estamos hartas de jugar sobre seguro”. Precisamente con esa frase titulaba Stylist magazine un reportaje a mayor gloria del maximalismo estético. Es decir: de las sombras de ojos contundentes, que no conocen los límites naturales del párpado, combinadas entre sí y con vocación de obra experimental. ¿Objetivo? Que la gente se voltee a mirarte a los ojos por la calle. Puedes empezar con las divinísimas paletas de Chiara Ferragni.
El juego que proponen los maquilladores esta temporada (tranquila, es muy sencillo y puedes llevarlo a cabo en casa) es dejar a un lado las aburridas rutinas del día a día, coger una paleta de sombras y jugar con varios colores a la vez, sin mayor ambición que la de ver qué sale. Borrar. Repetir. Disfrutar. Si el pasado febrero Pat McGrath nos tuvo a tod@s en busca del secreto de la piel de muñeca que tenían las modelos en el desfile de alta costura de Maison Margiela Artisanal… ¿cómo no vas a perder tú el miedo a mezclar dos colores con un pincel?
¿Prefieres ir sobre seguro, que te demos alguna pista de por dónde empezar? No hay problema, echa un ojo a los desfiles de Noir Kei Nonomiya y Loewe (aunque tengas que rebajar un poco la efusividad metálica de sus propuestas), Dries Van Noten (aprende de los maestros a mezclar dos colores para hacer de un maquillaje clásico algo rabiosamente contemporáneo) o Ganni (quizá la versión más asumible: el equilibrio perfecto entre el riesgo y la tradición). Piensa en lo que ellos han hecho, ponte frente al espejo y comienza a convertir tus sueños más maximalistas en realidad.
Paloma Abad
